El (ya no tan) jovenzuelo de Detroit ha vuelto a sorprender a todo el mundo y, de paso, desquiciar a la industria. Me explico: sin previo aviso, a los compradores de sus coquetas tiendas (Londres, Nashville y Detroit) se les deslizó en la bolsa un vinilo de 10” blanco que rezaba “NO NAME” en la galleta. ¡Acababan de llevarse a su casa el nuevo trabajo de Jack White en solitario! Un álbum del que aparentemente no se sabía nada ni nadie esperaba.

Es curioso que el día que el mundo casi se detiene por culpa de la informática, por un fallo del entorno de Microsoft, lo analógico llegaba al rescate: un plato, un vinilo y una aguja surfeando sobre sus surcos le alegraron el día a los afortunados. Algunos de ellos habían recibido el soplo y habían madrugado y por la tarde este nuevo disco ya estaba circulando en YouTube:

https://youtu.be/QiMvJylbX3Q?si=f77H5w20cwm1nQVX

Aparentemente con el beneplácito de White, que no ha hecho mención alguna en su web o redes sociales.

A lo largo del viernes la cuenta de Instagram de Third Man Records –la discográfica de Jack White– colgaba una imagen con la galleta del disco acompañada de este texto: “Today you have proven that the quiet rumblings of something mysterious can grow into the beautiful experience of a community sharing the excitement and energy of music & art”. Vamos, una invitación a que te dejes caer con más frecuencia por sus moloncísimas tiendas. Una inmejorable campaña de publicidad para unos sitios caros, muy caros, pero donde puedes comprar cachivaches únicos. Especialmente amplia y bella es la de Detroit, en las que desde unas cristaleras puedes comprobar cómo trabaja la fábrica de vinilos que tienen en la parte trasera.

Además, este pasado viernes se celebraba cerca el festival Concert of Colors, que contó con un concierto tributo a MC5… ¿Casualidad? No lo creo, porque el hecho de que Jack White parezca impredecible no significa que no dé puntada sin hilo y le guste convertir en un juego casi todo lo que hace. De hecho, consiguió viralizar entre sus fanses esto que la mañana del viernes había empezado como un secreto. Evidentemente, por la tarde había convertido a sus tiendas en un hervidero de seguidores y curiosos. También de especuladores, que por la noche ya estaban vendiendo el vinilo por más de 500 $.

Dicen que si miras de cerca el vinilo se pueden leer en los surcos “Heaven And Hell” y “Black And Blue”. Y si nos vamos a lo verdaderamente importante, la música, hay que decir que esto es auténtico bálsamo para los tímpanos de aquellos que acabamos hartos de experimentación (con “Boarding House Reach” (2018) y “Fear of the Dawn” de 2022). Cierto es que “Entering Heaven Alive” nos dio un acústico respiro y nos hizo recobrar ciertas esperanzas, pero es que este “No Name” es un auténtico pelotazo. Una auténtica orgía de distorsión, rebosante de fuzz y riffs salvajes que entronca con los dos primeros trabajos del músico, los imponentes “Blunderbuss” (2012) y “Lazaretto” (2014). Hay alguna punkarrada garagera como “What You Know”, que cierra la cara A, pero lo que prima es ese rítmico y poderoso rock de genotipo setentero que White arrastra a su terreno. Y quizá la mayor concesión a esos experimentos sonoros de los que tan disfruta sea el cierre del álbum, “You’ve Seen It All”.

A la espera de que se acabe editando (tarde o temprano en las plataformas de streaming) aquí tenéis el supuesto listado de canciones del disco mientras nos encomendamos a que San Azkena nos tenga en sus plegarias ;-)

CARA A:
0:00 For Free
3:28 God On Demand (Blessed)
5:58 Dial Tone
9:05 Rough For Rats (Asking)
13:11 Voodoo
15:58 Movin' Along (If You Don't Kill Me)
18:27 What You Know

CARA B:
21:46 Tonight Was a Long Time Ago
25:57 Underground
29:37 [Assassination] 30:09 Fish Himself Out
32:53 They're Coming Alive
35:54 Missionary
38:25 You've Seen It All